Cada vez es más evidente que el
camino de evolución del ser humano se dirige a una convivencia con su hábitat,
es decir, vivir sin destruirla. La ecología transmite una cantidad de valores
invaluables que nos enseñan que no se tiene que perjudicar a otro ser vivo para
triunfar. Es ese balance uno de los postulados fundamentales de la vida en
serenidad.
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Fernando Arreaza
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